Rectas y curvas

DE EXPERTOS Y CONTERTULIOS 

"A LA ESPAÑOLA"/ 

José Ángel Castillo Vicente


Tenemos un Nuevo Orden Mundial, como acostumbra a soltar, entre frases menos trascendentes, nuestra "Castelar" de bolsillo, la ínclita señora Montero, portavoz del habla cercana y bullanguera de un mercado popular..., y a mucha honra.

Definitivamente , nos sobra parafernalia y paja de envolver regalos. Llegué a la conclusión hace algún tiempo de que rebosamos estructura y carecemos de verdad. Nos sobran palabras y nos falta trabajo. Tenemos un endémico superávit de jefecillos y una carencia patológica de auténticos líderes que entiendan de guiar.

Tras del cotidiano tránsito por el dial de la radio medio creíble, - los distintos canales de la parrilla televisiva son un inmenso cenagal, terreno abonado para la contumaz repetición orquestada, la adulteración de la noticia y la más descarada manipulación dirigida a la masa borreguil que los transita - , me pregunto : ¿Dónde están esos sabelotodo, arcanos de la ciencia infusa, líderes mediáticos de cábala e invento, charlatanes de dictamen infalible, ahora desaparecidos en ignoto paradero? ..., esos mismos que han venido pontificando a diario, con solemne acento y tonillo de superioridad manifiesta, que no se produciría con absoluta seguridad el ataque ruso a Ucrania, esos que, con sus preámbulos doctorales y voces engoladas, dictaminaban que no eran más que baladronadas, amagos de farol, de personajes que estaban ligados por intereses económicos basados en la globalización que nos quiere vender esa chusma canalla, por supuesto con la base inequívoca de grandes beneficios para su bolsillo..., ¿Dónde, pues, se esconden ahora toda esa corte de majaderos, convertidos en oráculos de feria?...

Bien, por supuesto están. Son los mismos de siempre y permanecen en el sitio acostumbrado en que suelen delinquir. Pero ahora, sin disculparse previamente, dejan paso a los enviados especiales que nos explican el color de las cenizas, las largas colas de otro nuevo éxodo del miedo, los sonidos lacerantes de sirenas y explosiones, el llanto de los niños aterrados y los gritos de sus madres, invadidas por un miedo irrefrenable. Y ellos no se disculpan. Jodidos expertos y altivos tertulianos, que siembran desconcierto, desinforman y no piden perdón. Nunca lo hacen. Pero siguen incurriendo, cual Tezanos de la vida, en los mismos "errores" programados por el marketing que asaz convenga. Los más considerados, quizás apunten fórmulas, secretos algoritmos, para explicar qué contingencias influyen para que, una vez tras otra, no den ni un solo martillazo en el centro del clavo. Otra vergüenza más de esta flamante NMNM (Nueva Mierda de Normalidad Mundial) que nos atosiga y quita el sueño.

Lo cierto es que, un día tras otro, el habitual paseo por las teles y las ondas, es poco recomendable para la salud mental, e incluso física, del sufrido ciudadano. Los grandes temas que dominan las parrillas, sin solución de continuidad, son los siguientes :

Primero : Guerra en Ucrania. Primero fue el traslado de fuerzas y las maniobras simuladas por aire, mar y tierra, y después, los pasos unilaterales sucesivos que el sátrapa ruso ha venido en dar, pasándose por el arco del Triunfo las normas del derecho internacional y las pocholadas de ilustres "buenistas" como nuestro gran Borrell. Por supuesto, motivando la declaración de nuestro amado líder a pie de Moncloa, sin uniforme militar ni lanza en ristre, para comentarnos lo malo que es el Putin de Belén.

Segundo : Navajazos de salón en el PP. La erótica de la envidia, las cúpulas de un poder a cualquier precio, el relato de cómo se puede perder el Norte en unos días, defraudar a un electorado, cazar brujas indebidas. Y un curso acelerado de cómo darse tiros en los pies, sin fallar tanto como los contertulios..., y todo para volver a Rajoy y a sus fórmulas gallegas. Porque Casado era parte de la sombra de Rajoy, Feijóo dormitaba también bajo el mismo castaño, y tanta vuelta y revuelta para detenerse al final en el mismo punto, alimentando un círculo vicioso de colosales dimensiones.

Tercero : La pandemia, que cede su protagonismo al resto de noticias que vienen sucediendo, hasta que ausencias momentáneas de conveniente actualidad para los intereses de los de siempre, aconsejan su regreso al copo de las parrillas mediáticas. Una pandemia que con cifras similares, o superiores incluso, a las que determinaron que nos encerraran bajo siete llaves, ahora parece no constituir un gran problema. Una pandemia en la que gente bien comprada, suelta sus mantras y no deja ni árnica para quienes, ante la ausencia de argumentos científicos y la ocultación de datos en incidencias post-vacunales, deciden no vacunar a sus hijitos de cinco años, personas sanas y dotadas de un reluciente y casi intacto sistema autoinmune que les hace pasar los hipotéticos contagios con menos síntomas que un inocente y desacreditado resfriado, ahora oficialmente difunto al igual que su prima la gripe de toda la vida. Porque la auténtica noticia, aparte de la avalancha de muertes continuas e inexplicables que asola la población sita entre los sesenta y los setenta y cinco años, hecho que amenaza con rebajar diez puntos la esperanza de vida en España - véanse estadísticas, si se tiene la suerte de encontrarlas a mano - , es que han liquidado la gripe, el resfriado, la neumonía y el vulgar catarro común de siempre, ya que solo es necesario pulsar a voluntad el botoncito de una nueva cepa que dificulte un poco la acción de la vacuna de turno y aconseje su renovación, extremo ya previsto en los laboratorios correspondientes. La tercera, la cuarta dosis y la quinta preparada para, con acompañamiento de la banda a todo viento en el coso del engaño, se siga practicando la suerte de banderillas y la multinacional de marras, facturen a velocidades de reactor.

Tenemos un Nuevo Orden Mundial, como acostumbra a soltar, entre frases menos trascendentes, nuestra "Castelar" de bolsillo, la ínclita señora Montero, portavoz del habla cercana y bullanguera de un mercado popular..., y a mucha honra.

En tales circunstancias, es penoso que en las redes sociales, en que frecuentemente aparecían cosas dignas de ser leídas, semejen hoy un gigantesco túmulo funerario, un inmenso mausoleo en el que las esquelas se suceden y monopolizan el espacio, con gente despidiendo a padres, hermanos, tíos, cuñados, abuelos y amigos, que han ido pasando a mejor vida en estos dos primeros meses del año, como si de un sirimiri galaico se tratase. Así las cosas, algo tan simple como un D.E.P., se ha convertido en el comentario de moda, la frase del año, el no va más de las relaciones sociales, en esta era de abandono de lo divino y de lo humano.

Y lo más importante, acabo de oír esta mañana la última tendencia ordenada por la máquina del orden ciudadano : el coro dice ahora que lo de Ucrania "no tiene remedio", con una desfachatez que linda con el cinismo más flagrante. Que no podemos ayudar a los pobres ucranianos, por miedo a la guerra nuclear. Conviene recordar que no estamos hablando del antiguo y poderoso imperio ruso, sino de un país con un PIB similar al de España y una medianía de economía en general. Pero, desde hace décadas, todo el "stablishment" mundial ha permitido a sus enemigos naturales armarse hasta los dientes, con asignaciones a Defensa y Armamento, superiores al cuatro por ciento, mientras nosotros nos dedicábamos a defender a ultranza una gran cantidad de chuminadas accesorias propiciadas por la omnipresente Agenda 2030, intentando dotar a las matemáticas de sentimientos, llamando a las "gallines" por su nombre, sosteniendo que los pedos de las vacas son los que destrozan la integridad de la capa de ozono..., y ahora, el último torpedo en la línea de flotación de la enseñanza, el nuevo "curriculum" para Primaria, que propone la supresión de la regla de tres, los números romanos, - ¿a quién dañarán los pobres? - , el mínimo denominador común, los dictados..., y para qué seguir, en un nuevo atentado contra la calidad de la enseñanza, en su afán de fabricar cordadas de esclavos intelectuales, para su más cómodo dominio y manipulación.

Sigamos, pues, en nuestra línea de sumisión a las directrices de lo que nos está llevando al abismo, aplicando la aberrante lucha de géneros que mantiene entretenido al personal, la inclusividad, resiliencia, la imprescindible sostenibilidad de los "modernos" y demás orquesta de gaitas destempladas. Y, ¡Válgame Dios!, todo ello sin que a nadie se le ocurra tratar de cortar nuestra loca dependencia, estimada entre el cuarenta y el cincuenta por ciento, de las energías de las que nos provee el enemigo secular, argumentando que ya no es una dictadura comunista, sino una democracia "plena y honorable". Eso sí, en manos de un dictador de libro.

Si uno vuelve la vista atrás, emergen las figuras como Churchill, Reagan, Thatcher o Juan Pablo II, ahora sustituidas por los Sánchez, Macron, Ursula von der Leyen, Johnson o el mismo Francisco. Y la corte de oráculos de tres al cuarto, con sus correspondientes tertulianos habituales, funcionando a pleno pulmón.

Mejor, mientras podamos, dar un paseo y tratar de aclarar para qué sirven estos tertulianos que yerran hasta para dar en el blanco miccionando, o el mismísimo Consejo de Seguridad de la Otan, cuya última reunión aprovechó, en un bestial gesto de desafío, el monstruo con rostro de serpiente para sembrar el terror allí donde hasta ese momento no había llegado aún.

Para echarse a temblar.

José Ángel Castillo / Marzo 2022


LO SOSTENIBLE/ 

José Ángel Castillo Vicente

Intrigado por el desafuero, bajo y le sigo con atenta mirada y durante muchos metros en su rectilínea trayectoria, cual rata encantada por el flautista y doy fe que no he atisbado artilugio alguno en el que se recoja al menos una parte del negocio soplado por el asesino del cañón.

Aunque pueda parecer mentira lo que sigue, puedo garantizar que no lo es. Acabo de ver, eso sí, sin dar apenas crédito a lo visto, a un uniformado y anti reflectante gachó de porte bizarro que atiza de lo lindo al polvo acumulado en acera y calzada, papeles, mondas de naranja incluidas y botellitas de plástico vacías procedentes del mini botellón de todos los Jueves por la noche. Utiliza, con espíritu digno de mejor causa, una especie de cañón que, aún no escupiendo fuego ni proyectil alguno, aparenta ser tan dañino y amenazante como los del pirata Morgan, puesto que su asombrosa misión no es otra, intrínsecamente, que desplazar la susodicha porquería a lo largo de la calle con su potente chorro de aire a presión e insoportable ruido, mucho más allá de los decibelios permitidos por cualquier normativa municipal de andar por casa. Recordemos que, en materia de limpieza, lo que no ve el ojo de la suegra, carece de importancia.

Intrigado por el desafuero, bajo y le sigo con atenta mirada y durante muchos metros en su rectilínea trayectoria, cual rata encantada por el flautista y doy fe que no he atisbado artilugio alguno en el que se recoja al menos una parte del negocio soplado por el asesino del cañón.

Tras devanarme los sesos, tratando de hacer luz en mi mente y averiguar el objetivo que pretende alcanzar el cualificado gilipollas capaz de parir la malhadada idea, tan sólo logro acordarme de su señora madre, puesto que el desenfadado pistolero, no consigue en ningún momento que se evaporen los vestigios de su gran soplada, aunque debo reconocer que, a su paso, todo queda sin papeles y los coches aparcados adquieren una pátina de polvo que los ennoblece y los convierte casi en antigüedades. En consecuencia, paso a sospechar que alguien habrá supuesto que aumentarán su valor de mercado y, quieras o no, ahí tendremos un servicio a un sector de ciudadanos.

Dándole vueltas, también cabe la posibilidad que el autorizado mandamás de algo, haya formado alguna lucrativa sociedad en sombra con el consorcio de Lavaderos de automóviles o similar, cuyos estatutos y participación se nos ocultan a los sufridos contribuyentes.

Regreso a casa, impactado por la experiencia y comienzo a afeitarme. Conecto la radio del baño y... ¡ eureka, ya tenemos otra !, sale una voz engolada con entonación solemne, diciendo que Murcia es una ciudad "sostenible", ...., ¡Ahí le ha dado!..., seguro que en esto reside la explicación al fenómeno, porque continúa el baranda diciendo que, gracias a los denodados esfuerzos de todo el desparrame de gente que nos gobierna, podemos tener las calles limpias y muy sostenibles y, si no fuese por ellos que curran de sol a sol, los desagradecidos ciudadanos de a pie no podrían sostenerse y, luego a luego, hasta las personas perderían el equilibrio y caerían por los suelos sin solución de continuidad...

¡Hombre, por Dios! ¿Cómo olvidar ni por un momento que, hoy en día, cualquier chorrada ha de ser "resiliente, inclusiva, solidaria, bioecológica" y, por supuesto, sostenible?. Es más, si puede ser, "mogollón sostenible" - que dicen los muy guays - ... Es decir, muy, pero que muy sostenible.

Está claro que en estos tiempos de "Nuevo Orden Mundial" y sus Agendas 2030, 2050 y sucesivas, si no eres sostenible, amorfo, inclusivo y, lo más importante, "resiliente", no puedes aspirar ni a que te escuchen cuatro gatos. No importa tu categoría profesional, científica o artística, por muy contrastada que ella sea, sobre todo si eres de pensamiento conservador porque, de lo contrario, siempre habrá un resquicio, una excusa peregrina o una presunción de inocencia que llevarse a la boca para justificar determinadas actuaciones injustificables. Algo más antiguo que la cuchara, es la "doble vara de medir", herramienta indispensable donde las haya para cualquiera que guste de ir medrando en política.

Llegados a este punto, toca preguntarse cómo hemos podido vivir hasta ahora, cuando hace décadas nadie se preocupaba, ignorantes que eran, de hacerlo todo sostenible, por supuesto también la basura.

Es evidente que las grandes creaciones de la Humanidad anteriores a la Era de lo Sostenible, están carentes de valor al no tener en cuenta sus autores los inefables criterios de la Sostenibilidad mayestática. Pintores como Velázquez, Goya, Tiziano, Rubens, Monet, se han atrevido inconscientemente a legar sus obras a la posteridad sin etiquetarlas previamente con la indispensable vitola de ser sostenibles en el tiempo. Qué puñetas se supone que hacía el tontarra de Fidias, diseñador del Partenón, no pensando que la belleza radicaba en la mayor o menor sostenibilidad del conjunto arquitectónico. Y así hasta la extenuación, porque el argumento es aplicable desde las sinfonías de Beethoven hasta el mismísimo Quijote.

Y las lágrimas afloran cuando recuerdas que ni la Alhambra, ni la Sixtina, ni el "E lucevan le stelle" de Pavarotti en "Tosca", ni tampoco el "My Way" de Sinatra, ni el marisco gallego ni, seguramente, la "Zara" de Amancio Ortega, llevan aplicadas en su creación los supremos conceptos de la Sostenibilidad. Suerte que, llegado el día, algún imbécil integral dió con la tecla. ¡Qué descubrimiento, leche, para la Humanidad! ... y, mientras, el tío del cañón de aire a sus anchas y desparramando porquería por la ciudad.

No somos nadie.

José Ángel Castillo


 LA OTRA NAVIDAD/

José Ángel Castillo Vicente

Hace muchos meses, comencé a anotar en una libreta las "perlas" que las mafias de la comunicación iban desgranando día a día. Créanme, no tienen desperdicio y, dada su repetición y el cariz que van tomando, no merecen ni siquiera una recopilación más o menos exhaustiva. La iniciativa no ha sido más que tiempo perdido.

Sigo habitualmente las noticias diarias, y consulto a Maldita.es de vez en cuando. Y no porque confíe en la imparcialidad del señor Ferreras y de doña Ana Pastor, su santa esposa, sino porque estoy harto de recibir algunos mensajes que huelen a bulo a cien leguas de distancia, vía whatsApp sobre todo. Hace tiempo dejé de conceder credibilidad a ese tipo de información sesgada y susceptible de ser manipulada por intereses de parte. Pero, por esa misma razón, también debería dejar de tener en cuenta las flagrantes campañas que la mayor parte de los canales televisivos llevan a cabo, mientras lanzan sus mensajes "políticamente correctos", siempre a favor del viento que el poder pone en circulación.

Hace muchos meses, comencé a anotar en una libreta las "perlas" que las mafias de la comunicación iban desgranando día a día. Créanme, no tienen desperdicio y, dada su repetición y el cariz que van tomando, no merecen ni siquiera una recopilación más o menos exhaustiva. La iniciativa no ha sido más que tiempo perdido. Las "perlas" de la cosecha de hoy, recogidas a través de un ágil zapeo auditivo entre Onda Cero, Ser y Cope, han sido, entre otras, las siguientes :

1) Sorprendentemente, al menos para mí, unos setenta y siete mil sanitarios están sin vacunar en España. El gobierno optará entre la vacunación obligatoria, la realización de tres test semanales o el establecimiento de una sanción administrativa para estos profesionales. Uno se queda perplejo, pues este colectivo ha sido testigo de excepción de las muertes y sufrimientos causados por el virus entre la población. Algo deben saber que no les gusta o no les acaba de convencer.

2) La inflación en Noviembre ha llegado a un alarmante 5'5 %. Es evidente el deterioro del poder adquisitivo de los españoles en general, pero los sindicatos no consideran que haya nada que defender en esta tesitura. Sin embargo, sí se van a movilizar junto al independentismo, con objeto de presionar a la familia del niño de cinco años de Canet de Mar,. Sí, han leído bien... ¡Cinco años!. De alguna manera han de agradecer el aumento de un cien por cien de su asignación a cargo del erario público.

3) Va llegando, cada vez más fuerte y consistente, la amenaza de que el Banco Central Europeo comenzará a restringir la compra de deuda pública de sus países miembros. Eso comportaría una catástrofe para España, teniendo en cuenta el nivel récord de deuda alcanzada a día de hoy, así como la realidad de unos PGE basados en una errónea tasa de crecimiento, doble de la que vamos a lograr finalmente. Ello significará un sensible incremento en el déficit, cuya financiación nos será imposible de encauzar. Parece que se han cansado de financiar nuestros desajustes y es claro que ningún partido político se atreve, dado el coste electoral que representaría, a aplicar políticas austeras y de reducción del gasto, absolutamente necesarias en cualquier economía sensata, con tal de no someterse a una merma presumible en sus objetivos de captación del voto. Sumemos la presumible elevación del tipo de interés y tendremos ante nuestros ojos asombrados una tormenta perfecta que acabará con nuestro relativo bienestar en un abrir y cerrar de ojos.

4) Y qué decir del aluvión informativo que no cesa, referido al aumento de la incidencia en las cifras de contagios del Covid 19. La errática, poco científica y escasamente precisa información sobre la vacunación a nivel mundial - el continente africano se encuentra en unos niveles repugnantemente bajos, por citar un ejemplo - y la anarquía existente en las medidas a adoptar en cada uno de los diecisiete reinos de taifas presentes en el país. Mención aparte para la brutal escalada del precio de la luz, que en lugar de ir descendiendo sigue su ascenso imparable batiendo récords y limpiando los bolsillos del ciudadano de a pie. Si a esto le añadimos el tremendo crecimiento de los suicidios en nuestros jóvenes, que solo un seis por ciento de ellos logra emanciparse antes de los 24 años, que el paro juvenil supera el 40% y nos coloca en cabeza de los países de la UE..., la empanada mental y la jaqueca del sufrido radioyente, se torna inevitable de pura necesidad.

No obstante, recibimos el increíble mensaje de que todo va bien, de que todo "progresa adecuadamente" - odio ese término - , a pesar de que cualquier espectador imparcial puede interpretar a la perfección la realidad que estamos padeciendo y el futuro que nos espera, salvo milagro navideño.

La clase política en general debería dejar de insultarse en sede parlamentaria y bucear honradamente en su fuero interno, preguntándose : ¿Creemos de verdad que esto va bien? ..., porque con su actitud de tirar balones fuera, ganar tiempo esperando que la masa amorfa en que se está convirtiendo el pueblo español, siga en su letargo y no proteste, y si lo hace, procurar que su voz tenga el menor alcance posible, lo único que está logrando es que ese pueblo modélico pierda del todo la confianza en sus representantes y en el sistema, lo que aún es mucho peor, por lo que conlleva de terreno consumido hacia la total desesperanza. 

Se aproximan las fechas más señeras de la Navidad. Tras de otro debate innecesario, ya tenemos luces, pero ¿podrán alumbrar el desencanto?..., pensé que este 2021 marcaría un hito de mejora ostensible sobre su maligno antecesor, pero acaba de forma tan preocupante como lo hiciese el 2020. Y se van reduciendo mis ansias de apelar a la utopía, a la esperanza ciega.

Os dejo un poema corto que hice a finales del pasado año y que aún permanece inédito. En él se reivindica que ésta es una época del año en la que debemos obligadamente volver la cabeza hacia el prójimo más necesitado. Seamos solidarios, cada uno dentro de sus posibilidades, y ello nos confortará bastante más que las puercas noticias que nos llegan y no nos permiten ni respirar.

LA OTRA NAVIDAD

Hay fiestas de un color tan diferente

como la llama dista del agua que la apaga.

Cada pobre que pide en Trapería

es un aldabonazo en la conciencia;

sus sombras son más fuertes que las luces

que fulgen impertérritas

en la calle que grita sin cesar,

clamando a los viandantes Navidad...

Con los datos en la mano, se me hace muy difícil desearos a todos felicidad. Lo haré por pura inercia, sin apenas convicción, aunque deseando que las predicciones yerren, como todos erramos repetidas veces. Así es que, alto y claro, "Feliz Navidad y un maravilloso y bonancible año 2022" para todos vosotros y vuestras familias". Un abrazo.

José Ángel Castillo / Diciembre 2021 

¡Crea tu página web gratis! Esta página web fue creada con Webnode. Crea tu propia web gratis hoy mismo! Comenzar